El fallecimiento de Liam Payne, exintegrante de One Direction, sigue generando conmoción tras los recientes detalles revelados sobre sus últimos momentos. Payne murió el pasado 16 de octubre al caer desde un balcón en un hotel de Buenos Aires, Argentina. Días después, su funeral privado en Londres reunió a sus antiguos compañeros de banda, Harry Styles, Zayn Malik, Niall Horan y Louis Tomlinson, quienes ofrecieron su apoyo a la familia del cantante.
Nuevas imágenes difundidas por el Daily Mail han encendido el debate público. Captadas por las cámaras de seguridad del hotel CasaSur Palermo, estas muestran a Liam en estado de aparente inconsciencia, siendo trasladado con dificultad por tres empleados hacia su habitación. Según los registros, el proceso tomó más
de 11 minutos, y ocurrió una hora antes de su caída mortal.
Testigos aseguran que Payne había convulsionado en el vestíbulo del hotel poco antes de ser llevado a su habitación, lo que ha levantado dudas sobre si el personal actuó adecuadamente. La falta de asistencia médica inmediata tras el episodio ha generado indignación, especialmente entre los seguidores del cantante, quienes han acusado al hotel de posible negligencia.
Las imágenes, que muestran a Payne en presunto estado de intoxicación, han aumentado las especulaciones de que su fallecimiento podría estar relacionado con el consumo de sustancias. Sin embargo, hasta el momento no se han confirmado oficialmente estas hipótesis.
El público ha exigido una investigación rigurosa para esclarecer los hechos. Las redes sociales están llenas de mensajes pidiendo justicia, mientras la prensa británica critica el manejo de la situación por parte del personal del hotel.
Esta filtración no solo genera dolor entre los fanáticos, sino que también pone en el centro del debate las medidas de seguridad y responsabilidad de los establecimientos en casos de emergencia. A medida que las autoridades continúan las investigaciones, el mundo sigue lamentando la pérdida de un ícono musical cuya vida terminó trágicamente.
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