Yolanda Saldívar sigue tras las rejas: le niegan la libertad condicional tras 30 años de prisión

Tres décadas han pasado desde aquel fatídico 31 de marzo de 1995, cuando el mundo de la música perdió a una de sus estrellas más brillantes. Selena Quintanilla, la reina del Tex-Mex, tenía un futuro prometedor en la música pop en inglés, pero su vida fue interrumpida trágicamente por Yolanda Saldívar, quien era su amiga, presidenta de su club de fans y administradora de sus boutiques.

Hoy, 30 años después, las autoridades de Texas han determinado que Saldívar seguirá en prisión. Un panel de tres miembros de la Junta de Indultos y Libertad Condicional votó en contra de su liberación debido a la gravedad del delito y al peligro que aún representa para la sociedad. La decisión fue bien recibida por la familia de Selena y por Chris Pérez, su viudo, quienes consideran que la justicia sigue protegiendo la memoria de la cantante.

Yolanda Saldívar cumple su condena de cadena perpetua en la unidad penitenciaria Patrick L. O’Daniel en Gatesville, Texas, con la posibilidad de solicitar nuevamente la libertad condicional en 2030. Su sentencia, dictada en 1995, le otorgaba la opción de apelar después de 30 años, pero su historial y las circunstancias del crimen pesaron más en la decisión de las autoridades.

El asesinato de Selena sigue siendo un episodio doloroso en la cultura pop latina. Aquel día, Saldívar citó a la cantante en un motel de Corpus Christi con la excusa de entregarle documentos financieros. La joven artista, quien ya sospechaba de desfalcos en su negocio, recibió un disparo en la espalda mientras intentaba huir. Con las pocas fuerzas que le quedaban, logró correr hasta el vestíbulo, donde identificó a su agresora antes de desplomarse. Minutos después, su muerte fue confirmada en el hospital. Tenía solo 23 años.

Desde su ingreso a prisión, Saldívar ha alegado que el disparo fue accidental y que en realidad planeaba quitarse la vida. A lo largo de los años ha presentado varias apelaciones y quejas sobre su trato en la cárcel, afirmando ser víctima de maltratos debido al alto perfil de su caso. Durante su estancia en prisión, obtuvo un título de asistente legal y un grado en justicia penal, pero nada de esto fue suficiente para convencer a la Junta de Indultos de que merecía salir en libertad.

Para los fans de Selena y su familia, la negativa de la libertad condicional es un alivio. Suzette Quintanilla, hermana de la cantante, expresó en redes sociales su agradecimiento a la justicia y recordó que, aunque nada puede devolverles a Selena, al menos su asesina seguirá pagando por el crimen.

El legado de la reina del Tex-Mex sigue vivo, su música continúa sonando en todas partes y nuevas generaciones la siguen descubriendo. Mientras tanto, Yolanda Saldívar seguirá cumpliendo su condena, con la esperanza de una nueva oportunidad en 2030.